Los 100 años de Yiyo el Zeneize

Yiyo el Zeneize cumplió 100 años y lo celebró con fiesta popular. Un numeroso grupo de vecinos y vecinas se dio cita en la esquina de Avenida Eva Perón y Florentino Ameghino, para homenajear al tradicional “almacén cantina” del Barrio de Parque Avellaneda.

Hubo música, show y baile con la presencia de Gaume y Piñol, dúo de Tango, y La Madrugona Teatro “El Averete”, además de un desfile de autos antiguos. Instituciones del barrio como la Unión Vecinal y Cultural Cildañez, y comerciantes de la zona acompañaron con stands y puestos el desarrollo del festejo.

Estuvieron presentes el Presidente de la Junta Comunal Maximiliano Mosquera Fantoni y los Comuneros Lorena Crespo y Favio Pirone. Mosquera Fantoni expresaba a través de las redes “¡Felices 100 años “YIYO, EL ZENEIZE”! Cien años de historias, anécdotas, comidas, charlas, festejos, reuniones, en definitiva, un siglo de crecer juntos en el barrio y en familia”. Pirone, por su parte comentó: “Sus nietos recuperan la historia e identidad en el barrio. Lindo domingo pasado con la vieja, y con la foto de mi abuelo en sus paredes”, en referencia a las fotos de las reuniones que la Sociedad de Fomento Fiorentino Ameghino, organizaba para el entubamiento del Arroyo Cildañez y otras reivindicaciones barriales. Mientras Lorena Crespo nos decía: “Un emprendimiento familiar que cumple nada menos que una centuria. Historia y gastronomía, una mezcla de migración italiana y cultura criolla, propia de nuestra Comuna9

Los vecinos y representantes de instituciones también destacaron la significación del acontecimiento. Entre ellos, Jorge Botta decía: “Estuvo hermosa la organización, los stands ,la exposición de autos y lo más rescatable el comportamiento de la gente que creo superó la mil personas . La Unión Vecinal y Cultural Cildañez contenta de haber participado de este homenaje a la trayectoria de Yiyo y a su barrio todo”. Y Favio Oliva señalaba: “Volvimos a encontrarnos en las calles y sentimos que los 100 años de Yiyo eran los 100 años del barrio. En 1914 se inauguró el Parque Avellaneda y en 1921 arranca Yiyo rodeado de inmigrantes que hicieron comunidad y se comprometieron con este territorio. Lucharon por la primera escuela pública, por el asfalto, por el entubamiento del Cildáñez. Marcaron un camino de participación ciudadana corresponsable que llega hasta nuestros días y se manifiesta en la Mesa de Trabajo y consenso de Parque Avellaneda y Cuenca En Red. Las redes del barrio estuvieron presentes y fue una verdadera fiesta popular de encuentro intergeneracional y de respeto por la diversidad que vino para quedarse y cada año será mejor!!”.

Los legisladores del Frente de todos, por su parte presentaron, en agosto de este año, un proyecto para que el almacén de ramos generales y bar, sea declarado “sitio histórico, y patrimonio cultural de la Ciudad” y e incluidas como “expresiones y manifestaciones intangible, las prácticas y saberes, que se han venido generando en Yiyo, el zeneize”, en el marco de la Ley N° 1227. Además encomienda cumplimentar las gestiones tendientes a catalogarlo como “bar notable de la Ciudad de Buenos Aires dentro del Régimen de promoción de cafés, bares, billares y confiterías notables”.

Abrió el Bar Egidio Zoppi, un inmigrante italiano del Piamonte, que llegó a Buenos aires a principios del siglo XX. Trabajó en la estancia de los Martínez de Hoz, donde lo echaron sin pagarle y luego pasó a otra estancia en Mataderos, donde llegó a ser capataz. Su dueño le ofreció la esquina de campo donde, alrededor de 1920, comenzó a construir su casa y el local que en 1921 comenzó a funcionar como despacho de bebidas y almacén.

En los años 40, Luis y Batista, los hijos de Egidio, tomaron la posta, y le dieron el nombre de Yiyo el zeneize. El lugar guarda memoria de los vecinos que se reunían en encuentros familiares, de amigos o para organizar los reclamos de mejoras barriales. Esta historia se refleja en sus paredes y mostradores llenos de fotos, objetos y documentos, como los bocetos hechos a mano por fileteador Luis Zors.

En 2020, en plena pandemia, fallecieron los hermanos Zoppi, Luis de 91 y Batista de 93 años, hijos de Yiyo. Danilo Wortolec, su bisnieto, se hizo cargo del establecimiento, junto a su tío Omar y otros dos socios que suman su experiencia gastronómica: Maxi Luque y Cristian Díaz.

Hoy, Yiyo el Zeneize encarna esa mezcla de actualidad y trayectoria, de futuro y memoria que sostiene la vida de nuestros barrios.

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