El 17 de agosto, el Club José Hernández, destacada institución del barrio de Mataderos fundada en 1924, cumplió años. Para conocer más sobre su historia y su actualidad hablamos con Mariel Guillén, su presidenta, en la foto mostrando con orgullo su pileta.
La Asociación de Fomento Edilicio, Cultural y Deportivo José Hernández y Biblioteca Popular Eurindia, conocida como Club José Hernández tomó ese nombre, en 1944, luego de la fusión de dos instituciones que la precedieron: el Club Social Porteño, un lugar para el encuentro entre amigos, fundado en 1924, donde se pasaba el rato jugando a las cartas y a las bochas y la Asociación de Fomento y Cultura José E. Rodó y Biblioteca Popular Eurindia, fundada en 1938, que funcionaba en Pieres 1478. En 1941 ambas instituciones se mudaron a Bragado 5950, su sede actual, donde 2000 socios practican diferentes deportes y actividades sociales.
Mariel, el Club José Hernández ha cumplido años. ¿Cómo han vivido esta fecha especial?
Cumplimos 98 hermosos años. Estamos contentos por poder festejarlos después de los dos años durísimos que tuvimos que atravesar todos por la pandemia, lo que para una institución deportiva fue mucho más difícil. Pero ya está, estamos de pie, estamos vivos, cada día un poquito mejor, con el apoyo de toda la comunidad de Mataderos. Porque tengo que reconocer que recibimos ayuda de todos lados y sobre todo de los socios. Ya está próximo el festejo de los cien años. Falta poquito así que estamos ya trabajando en ello.
El Club José Hernández es una de las instituciones tradicionales del barrio de Mataderos. ¿Cuál es su situación en la actualidad, en esta época de flexibilización post pandemia?
El momento de la pandemia fue muy difícil para los clubes de barrio porque para toda familia lo primero que se corta es la actividad recreativa. Así que arrancamos la pandemia con 1300 socios, de los que, cuando terminaron estos dos años habían quedado 300, muchos de los cuales eran vitalicios. Fue muy difícil poder estar hoy de pie. Llegamos a pensar que una de las posibilidades era cerrar el club, porque no había forma de salir de tanta deuda, pero gracias a dios siempre sale un rayito de sol. Tuvimos el apoyo de todos los empleados. Muchos resignaron hasta sus sueldos, todos trabajaron más horas para que el club se pudiera abrir. Cambiamos un poco la parte deportiva para poder explotar al máximo todo el tiempo que pudiera estar abierto, para que estuvieran las actividades a pleno. Hoy por hoy tengo que decir que los servicios y los impuestos están al día, los sueldos se pagan en tiempo y forma. Así que estamos muy contentos, con un record de 2000 socios, con actividades nuevas y muchos proyectos
¿Qué nos podés contar sobre los inicios del Club y su trayectoria?
En sus comienzos fue un club de barrio, con muy poquitos socios, donde mucha gente de la comunidad se acercaba a jugar a las cartas Siempre se habla de los hermosos bailes que tenía el José Hernández. Muchos de nuestros abuelos se ha conocido en esos bailes y hoy traen a sus nietos al club. Hace muy poquito tuvimos una asamblea de socios donde se eligieron nuevas autoridades. La comisión directiva está formada por gente de esos años como Jorge Méndez, Félix Pica que son socios que nacieron en el club y también con otros más jóvenes, con ganas renovadas, con nuevos proyectos para llevar adelante. Antes era sobre todo un club de básquet. Hoy hay tres ramas de fútbol que están haciendo muy buen trabajo con los chicos. La pileta está preciosa, luego de que resolvimos un problema que hubo en pandemia. Los invito a todos a que puedan pasar por el club y verla. Hoy tenemos muchas actividades, sobre todo para los chicos. Este año tuvimos la suerte de que tener una colonia para tercera edad, que es la primera incursión que hace el club con adultos mayores. Pusimos un departamento de tercera edad y próximamente vamos a tener cosas para los abuelos de la zona para que puedan venir y tener su espacio Estamos con muchos proyectos para que el club vuelva a ser esa parte tan importante de la vida social. En un momento se lo tenía muy identificado con un nivel medio alto. Como si fuera sólo para algunos y hoy por hoy está demostrado que es un club del barrio de Mataderos que tiene las puertas abiertas para el que quiera venir. Cambió mucho la impronta y estamos trabajando para eso. Haciendo hincapié en lo social que es tan importante en estos tiempos.
En lo personal, en este momento en que la mujer ha tomado un papel importante en lo dirigencial, en la función pública ¿cómo es tu experiencia como primera presidenta de la institución?
Hacía doce años que formaba parte de la Comisión Directiva. Era la única mujer y en el mandato pasado, hace tres años, el expresidente saliente, Francisco Fieramosca (que tuvo dos mandatos porque por estatuto sólo se puede estar dos veces en el mismo cargo) me propuso postularme. La verdad es que salí corriendo, no quería saber nada. Pero mis hijos, que desde que nacieron están en el club, me convencieron. Soy profe de educación física y jugadora de básquet, veterana. Estuve mucho tiempo en el Deportivo Español, en socios y en la parte de deportes, o sea que entendía un poco de gestión deportiva. Fue difícil asumir como primera presidenta mujer. Entonces abrí todas las puertas a que todos me dijeran que es lo que esperaban en lo social, en lo deportivo. Como soy muy exigente hice carrera de gestión deportiva, me metí a estudiar, a leer, a ver y en la última asamblea fui reelecta. Pero estuve seis meses y después nos cerraron por pandemia. Ahora comienzan otros tres años en los que creo que voy a comenzar a disfrutar de mi gestión y ver los frutos. No fue fácil pero tampoco fue tan difícil porque en la sociedad la mujer se proyectó mucho más. En ese momento de pandemia, con todo el impulso de la mujer posicionada en la sociedad, también ayudó un poquito al club el que la presidenta fuese una mujer y la verdad es que nos escucharon. No digo que si fuese un hombre no hubieran ayudado al club obviamente que también, pero yo creo que las mujeres somos un poco más caraduras a lo hora de pedir. Yo me cansé de golpear puertas y por suerte tuvo sus frutos. Hoy seguimos sin perder la visión de lo que es una institución social y deportiva en la comunidad de Mataderos que es muy fuerte y es muy grande. No es fácil conducir a una institución así porque siempre hay decisiones que tal vez a unos les gusten y a otros no, pero no hay que perder el eje, hoy me toca estar mañana le tocará estar a otro pero lo que queda, lo que prevalece siembre es la institución.
¿Qué actividades desarrollan actualmente?
Vamos a mantener todas las actividades que tuvimos como esta colonia de tercera edad los martes y jueves, vamos a tener colonia de vacaciones en verano los tres meses. El club va a funcionar exactamente igual en verano como en invierno, todas las actividades continúan. Tenemos fútbol, karate, Taekwondo, baile, ahora pusimos tango -una actividad nueva que está funcionando muy bien-, salsa, patín, aquagym para los adultos. Está bastante completa la grilla de actividades. Los invitamos a todos lo que quieran pasar y asesorarse. Por las redes sociales también pueden consultar. Los invito, el club está hermoso y muy bien cuidado por gente que lo quiere mucho, como toda la comunidad mataderense, porque el José Hernández es muy querido por todos
Cuando era niña, funcionaba además una biblioteca; allí conocí las primeras poesías a los siete años…