Después de Décadas de lucha hoy tenemos más derechos
Escribe María Eugenia Torriglia. Fotografía Cecilia Catz
El 30 de Diciembre de 2020, pisando el final de un año difícil, en las puertas del Congreso miles de mujeres recibimos con mucha alegría el resultado de una votación en el senado que tenía por detrás décadas de lucha de los movimientos feministas en nuestro país. Desde los primeros grupos que tenían como reclamo el derecho a decidir en los ´70 y la formación de la Campaña Nacional por el Derecho al Aborto Legal, Seguro y Gratuito hace 15 años hasta las movilizaciones de “ni una menos” y las vigilias donde millones de mujeres y pibas con alegría y convicción reclamaban que era urgente que se terminará el miedo a morir en la clandestinidad cuando decidían no seguir adelante con un embarazo. Esa historia de luchas es hoy un derecho para millones, el derecho a decidir ser o no ser madres y elegir nuestro proyecto de vida sin el temor de morir en el intento, ser juzgadas o incluso encarceladas por ello.
Durante el 2020, en plena pandemia, la situación de riesgo para quienes querían interrumpir un embarazo se agudizó y las promesas de volver a tratar el proyecto que fue rechazado en 2018 parecían no cumplirse, pero finalmente durante diciembre quedó demostrado que seguiríamos movilizadas hasta que se trate y apruebe la ley. Desde la Campaña Nacional organizamos acciones en todo el país para visibilizar la urgencia de nuestro reclamo y durante las dos jornadas de votación vigilias frente al congreso y en más de 50 ciudades para seguir la votación y demostrar el poder de la marea verde en las calles.
Esa marea verde espero por cuarta vez una votación, que esta vez fue definitiva, y en medio de la noche celebramos con nuestras amigas, madres, hijas, hermanas y compañeras entre lágrimas y barbijos que a partir de ese día íbamos seriamos un poco más libres.
Ya en el 2021, este jueves se promulgará finalmente la Ley 27.610 de Interrupción Voluntaria del Embarazo, lo que abre una nueva etapa de quienes peleamos tantos años por el derecho al aborto: que es el de la implementación , para garantizar que no haya obstáculos para garantizarlo en todo el país. Para ello continuamos con nuestro reclamo de Educación Sexual para Decidir y acceso a métodos anticonceptivos, pero también por terminar con toda violencia y desigualdad que aún sufrimos las mujeres, convencidas de que luchar por nuestros derechos sirve.