El tradicional Club de Mataderos y Liniers cumplió 77 años y los festejó en su sede de Av. Larrazábal 829. La celebración arrancó con juegos de cartas, jenga, ajedrez, ping pong y tejo. Más tarde, se inauguró la terraza con brindis, canto y baile, con música en vivo.
El Club Social, Cultural y Deportivo Larrazábal ha sido espacio de encuentro para varias generaciones de vecinos y vecinas. Fue sede del primer concierto de la banda de rock “La Renga”. En la década del 60 albergó al jardín infantil “Topo Gigio”, en los ’90 a la Escuela de Psicología Social y en la crisis del 2001 sus instalaciones funcionaron como uno más de los innumerables clubes del trueque. Tuvo un rol protagónico en el año 1996 en la conformación de la Comisión de la Memoria de Liniers y Mataderos y en la Multisectorial que logró la creación de la Escuela Infantil N° 6 (DE 20) y el Centro de Salud y Acción Comunitaria N° 4. Hoy continúa su trabajo ofreciendo a la comunidad una amplia grilla de actividades.
En su balance del último año transcurrido señala: “Este ha sido un año de mucho trabajo y también de muchos logros. Hicimos arreglos y mejoras edilicias. Realizamos más de veinte actividades y talleres a lo largo del año; inauguramos la biblioteca de géneros, comenzamos con un ciclo de charlas políticas, sostuvimos la feria de emprendedores con frecuencia semanal, sumamos jornadas mensuales de reciclado, realizamos eventos de folclore, rock, tango, salsa, teatro, varietés, funciones de cine para les niñes, celebramos fiestas patrias, honramos a la Pacha Mama. Nos vinculamos con el barrio, intercambiamos con organizaciones, participamos como posta de vacunación, prevención y detección de ETS y difusión sobre dengue y otras con el Cesac 4, jornadas de trámites con Anses e Inadi. Recibimos un premio…Este ha sido un año muy fructífero para nuestro querido club y para quienes formamos parte de él”. Y para el 2023, la esperanza de que “nos siga brindando la posibilidad de seguir adelante y acompañándonos”.