El 9 de setiembre el Centro de Estudios Sociales y Actividades Vecinales de Parque Avellaneda cumplió 30 años. Lo celebró con un encuentro realizado en el Salón Presidente Perón de la Legislatura. Por su parte legisladores del Bloque Peronista y de Unidad Ciudadana presentaron un proyecto para declararlo de interés social.
En el encuentro en la Legislatura, además de un conjunto de stands donde se contaban las diversas actividades y acciones realizadas a lo largo de estos 30 años, y su trabajo por el barrio y el parque, se presentaron las “Comediantes de la Legua”, ex alumnas de la escuela de Teatro Callejero de la EMAD. Además se realizó un reconocimiento a los fundadores de la institución y una mesa con participación abierta de los presentes. Se destacaron las palabras de Tito González Taboas, fundador del CESAV e incansable luchador por la participación vecinal en la gestión asociada con el estado de los espacios públicos de la ciudad.
Por su parte, Santiago Roberto (Bloque Peronista), María Conde y Victoria Montenegro (Unidad Ciudadana) presentaron un proyecto para que la Legislatura exprese su beneplácito con el aniversario, en cuyos fundamentos se sintetiza la historia del trabajo del CESAV y del origen y evolución de la Mesa de Trabajo y Consenso del Parque Avellaneda, su logro más significativo
El CESAV se inicia el 9 de setiembre con la convocatoria de Tito González Taboas a un conjunto de vecinos. Situaciones previas y personas comprometidas fueron creando las condiciones para que la convocatoria prosperara. La efervescencia participativa que suscitó la recuperación democrática a principios de los ´80 promovió un espacio multipartidario en el barrio en el año 1986. En 1987, se organizó la primera fogata del barrio que fue creciendo hasta el espectáculo ¨Luz de Fuego¨ que hoy convoca a miles de vecinos de la ciudad.
En ese momento el barrio Parque Avellaneda no había construido su identidad. Esta situación fue entendida como una grave problemática por los vecinos fundadores del CESAV y se transformó en su primera bandera.
Por eso desde sus inicios el trabajo del CESAV sostuvo 3 ejes: Recuperar la Memoria, promoviendo la creación de la Junta de Estudios Históricos del barrio y realizando los primeros trabajos de investigación y recopilación de datos que permitieron trazar la línea histórica del barrio y sus diferentes etapas, poniendo en valor el patrimonio y estableciendo relaciones con la historia de la ciudad de Buenos Aires; Reconstruir el tejido social, actuando como institución nexo para establecer y fortalecer los vínculos entre las organizaciones y las personas; Reconfigurar la Identidad: redescubriendo y revitalizando una historia común para reconocernos parte de un mismo territorio y construir un ¨nosotros¨.
El CESAV consideró que el Parque Avellaneda era el núcleo identitario del barrio y un patrimonio natural, cultural e histórico de la región sudoeste de la ciudad que incluía a una parte del conurbano vecino que cada fin de semana se acerca a disfrutarlo. Este descubrimiento promovió una frase: ¨Si recuperamos el Parque, recuperamos el Barrio¨.
A principio de los ´90, a partir de un programa del Gobierno de la Ciudad, se produjo la vinculación con la Red GAO que buscaba implementar la metodología Planificación Participativa y Gestión Asociada en el oeste porteño. En el año 1994 el CESAV, junto a la red de organizaciones barriales, la red GAO y Flacso realizó las primeras jornadas para la elaboración del “Plan de Manejo del Parque Avellaneda¨, en las que se definieron 5 dimensiones de abordaje para la recuperación integral del Parque: Estrategia Cultural, Estrategia Medioambiental, Estrategia de Redes, Estrategia Regional Urbana y Estrategia de Gestión Asociada.
En 1997 se creó ¨Mesa de Trabajo y Consenso¨, ámbito abierto y público para la toma de decisiones por consenso. Èsta es la continuidad del CESAV manteniendo sus objetivos en un ámbito de gestión asociada, abierto y público. En el año 2000 se inauguró La Casona de los Olivera, importante edificio de 1850 de altísimo valor patrimonial como “Centro de Arte Contemporáneo y Sede de la Gestión Asociada”.
A partir de los logros alcanzados, se logró institucionalizar la experiencia con la sanción de la Ley 1153 (2003) de Parque Avellaneda, la primera de planificación participativa y gestión asociada. Esta ley se reconoce al Parque Avellaneda como ¨Unidad Ambiental y de Gestión¨ que incluye al Patrimonio en forma integral y al sistema de gestión participativa, al Plan de Manejo como el elemento ordenador de las acciones y mantiene a la Mesa de Trabajo y Consenso como al ámbito abierto y público donde confluyen todos los actores interesados para tomar las decisiones por consenso.
También, se creó el grupo de trabajo de educación que inició el proyecto ¨Aulas a cielo abierto¨, el Grupo de Medio Ambiente impulsó el Centro de Capacitación Ambiental y la Huerta Orgánica, la Estrategia Cultural creó un espacio de formación en teatro callejero y se multiplicó en diferentes disciplinas, se conformó el Grupo Promotor de la Escuela Media que recuperó al Antiguo Natatorio, los pueblos originarios instalaron la ¨Wak´a como un lugar significativo y de encuentro que celebran cada año el Inti Raymi y la Pachamama entre otras celebraciones y se desplegó la estrategia Regional Urbana del Plan de Manejo, extendiendo la dimensión regional y logrando sancionar en el año 2008 la Ley 3042 de APH que reconoce el Patrimonio del Parque Avellaneda y su entorno.
La MTC resistió y continúo promoviendo la creación de nuevos grupos que fueron sumando jóvenes vecinos al proyecto. El Grupo de Deportes, el Grupo del Trencito, la reapertura de la Sala de Cine y la Biblioteca son ejemplos claros de una experiencia que mantiene la iniciativa y sigue creciendo.
El CESAV inició las transformaciones en un espacio público que se encontraba abandonado y fragmentado. Lo recuperó instalando un sistema de cogestión que permite ubicarlo como referente de planificación participativa y gestión asociada y un modelo de desarrollo alternativo a otros que generalmente son impulsados por mega-emprendimientos que irrumpen y modifican el territorio sin tener en cuenta a sus habitantes.