Por Maia Anahid Laino Lombardi y Santino Filardi.
A 7 meses de un importante logro por parte de uno de los clubes de la Comuna 9, recordamos lo sucedido durante el año pasado, cuando el futsal vivió un gran año en relación al Torneo Oficial de AFA de la categoría C. Un deporte que mueve gran cantidad de gente, cada uno fiel a sus equipos, llevó a la final en busca del ascenso a los dos clubes más fuertes del certamen: Vélez Sarsfield y Alvear.
El conjunto de Parque Avellaneda finalizó como escolta de la segunda mitad del torneo. En cuartos de final superó a Miriñaque, en ambos encuentros por un parcial de 7 a 4. Luego, en semifinales, hizo lo mismo ante Social Parque, aunque con mayor diferencia al ganar por 8 a 4 en total.
Por su parte, Vélez culminó en el tercer lugar de la tabla de posiciones en ambas etapas. En cuartos, eliminó a All Boys por 9 a 3 en total. Posteriormente, en el partido de ida por las semifinales cayó ante Juventud de Tapiales por 5 a 4, pero en el siguiente El Fortín dio vuelta el resultado por 3 a 0 y avanzó de ronda.
El domingo 3 de diciembre se vivió el primer encuentro de la gran final de los Play Off de la Primera C. Dicho partido fue en el Espacio Multifunción II, Estadio de Vélez. Se impuso Alvear por 1 a 0. De esta manera, llegó con una leve ventaja al jueves 7, cuando recibió al equipo de Liniers para darle fin al torneo y, así, sellar un nuevo campeón. Tal partido fue muy intenso en todo momento, como se esperaba debido a los equipos que se presentaron. Sin embargo, Alvear fue el que consiguió la victoria por 5 a 4 (global 6-4), se coronó campeón y consiguió el segundo ascenso a la Primera B, categoría a la que subió junto a Deportivo Metalúrgico, conjunto que obtuvo el primer ascenso.
Richard Garayalde, futbolista de Alvear, comentó cómo se vivió todo el recorrido hasta llegar al objetivo: “La verdad que fue un alivio hermoso ver a toda esa gente feliz, contenta por haber logrado el objetivo. Creo que fue una satisfacción muy linda, los chicos venían de jugar dos o tres finales en el cual no se podía dar y por suerte pudimos coronarlo frente a Vélez, que fue una final durísima y muy competitiva, así que la verdad que fue un alivio muy lindo”. Además, agregó cuál fue el momento clave para cumplir el sueño de todo el club: “No sé si hubo un momento. Creo que todo el año fue clave porque nosotros fuimos muy parejos, tuvimos dos o tres derrotas, no estoy seguro, pero creo que no perdimos más de cuatro o cinco partidos durante todo el año, eso es tremendo porque fue un año larguísimo. Entonces, creo que el momento clave fue el día a día, no bajar los brazos y siempre dar pelea”
Richard Garayalde disputando la final ante Vélez.
Si bien, cuando inicia un nuevo torneo, el equipo siempre piensa en apuntar a lo mejor, siempre hay un momento donde se marca que el objetivo puede ser posible. En el caso de Alvear, este momento fue en los playoffs, cuando de manera individual y colectiva se entendió los tiempos y momentos de cada partido, como cuando marcar y cuándo se debe atacar. Esto, si bien parece sencillo ante los ojos de cualquier persona, es un trabajo enorme que lleva mucho tiempo y dedicación para luego poder dar el 100% y llevarse el triunfo.
El ex jugador de Huracán, sabía que Alvear era un club muy familiar, pero lo confirmó aún más en su llegada como jugador de futsal. Si bien llegó con buenas expectativas, una vez puertas adentro lo sorprendió la buena energía que hay en la institución y se encontró con mucho más de lo que pensaba.
Actualmente, Alvear se encuentra disputando la categoría B, una división muy competitiva. Tanto Richard, como todo el equipo de Parque Avellaneda, soñaba y anhelaba poder lograr el ascenso, no solo por el alto nivel que se maneja en la B, sino también por la dificultad de cada rival, lo cual demuestra lo que es esta categoría.
El equipo de Alvear momentos antes de disputar la final del campeonato.
Como primera meta para esta temporada, el equipo de Parque Avellaneda tiene en la mira ingresar a los playoffs y, a medida que se desarrolle el campeonato, ver para qué está Alvear. Por su parte, Garayalde sostiene que el conjunto tiene con qué hacerse fuerte y avanzar de ronda. Todo es trabajo, tanto físico como mental, que debe trabajarse cada día para llegar a los objetivos y, si se da, cumplirlos. Por último afirma que es un trabajo a largo plazo y que, aunque esta categoría es complicada porque ningún equipo regala nada, es muy linda para competir y demostrar que Alvear puede seguir creciendo tanto en el ámbito de futsal y como institución.